
El régimen cubano está organizando una rueda de casino simultánea en plazas y parques de todo el país, como parte de una campaña impulsada por instituciones oficiales que busca llenar las calles de música y baile este 3 de mayo. La iniciativa, presentada como un homenaje al Día Nacional del Son, ha sido impulsada en redes por figuras como el ex espía Gerardo Hernández en otro intento por desviar la atención de la debacle que padece el pueblo.
La rueda de casino simultánea es un evento organizado por el régimen cubano que tendrá lugar el 3 de mayo, donde se espera que plazas y parques de todo el país se llenen de personas bailando al compás de la música cubana. Este evento se presenta como un homenaje al Día Nacional del Son, pero ha sido criticado por ser una distracción ante la crisis económica y social que enfrenta la isla.
El objetivo principal del régimen cubano con la rueda de casino simultánea es proyectar una imagen de alegría y normalidad en medio de la crisis, a través de un evento masivo que busca llenar las calles de música y baile. Sin embargo, muchos critican esta iniciativa como un intento de desviar la atención del descontento social y la difícil situación económica que atraviesa el país.
La promoción de la rueda de casino ha sido impulsada por figuras del oficialismo cubano, incluyendo al ex espía Gerardo Hernández, actual coordinador nacional de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR). Hernández ha utilizado sus redes sociales para promover el evento y reforzar la narrativa oficialista que busca mostrar un país unido y alegre, a pesar de las adversidades.
La rueda de casino simultánea ha sido criticada por ser vista como una distracción de los problemas reales que enfrenta Cuba, como el desabastecimiento, los apagones y el aumento de la migración. Muchas personas ven este tipo de eventos como parte de una estrategia del régimen para desviar la atención del malestar social y la crisis económica imperante.
La cercanía de la rueda de casino con el desfile del Primero de Mayo, otro evento coreografiado desde el poder, refuerza la percepción de que el régimen intenta reforzar su narrativa de estabilidad mediante espectáculos masivos. Mientras se convoca a bailar casino en parques, miles de personas hacen colas para comprar alimentos básicos, enfrentan cortes eléctricos diarios o buscan cómo emigrar del país.
Aunque el Día Nacional del Son, celebrado cada 8 de mayo, es una fecha con valor cultural indiscutible, el uso político de tradiciones populares para reforzar la propaganda oficial no pasa desapercibido. La promoción de este tipo de eventos como mecanismo de distracción ha sido una práctica recurrente del régimen cubano, sobre todo en contextos de alta tensión económica y social.
No obstante, no se trata de un hecho aislado. En 2024, bailadores cubanos se prepararon para romper un Récord Guinness en La Habana con la Mayor Rueda de Casino del Mundo. En un ensayo realizado en La Piragua, el proyecto Retomando el Son, con respaldo del Centro Provincial de Casas de Cultura, reunió a numerosos bailarines para intentar crear la rueda de casino más grande del planeta, en un evento que