
Una cubana beneficiaria del parole humanitario I-220A celebró con emoción la compra de su primera casa en Estados Unidos. La joven compartió el momento emocionante con sus seguidores a través de un video en TikTok, que rápidamente se viralizó. En el video, ella se muestra mostrando la fachada de la vivienda que acaba de adquirir junto a su esposo.
“A todos los I220A como yo déjenme enseñarles que ya mi esposo y yo comenzamos a pagar nuestra primera casita”, dijo emocionada. “Miren esto, bendiciones para todos, aquí todo se puede lograr, a perseguir sus sueños. Aquí lo último que se pierde son las esperanzas, todo se puede lograr, bendiciones y sin miedo al éxito”.
El video ha resonado en cientos de usuarios que se identifican con la travesía de la cubana. Su mensaje cargado de esperanza y determinación ha sido compartido por muchos como un testimonio de la resiliencia de la comunidad cubana migrante.
El estatus I-220A es una libertad condicional otorgada a algunos migrantes que les permite permanecer temporalmente en Estados Unidos mientras resuelven su situación legal. Aunque no garantiza un estatus migratorio permanente ni protege contra la deportación, ha sido una vía para que muchos puedan trabajar y establecerse provisionalmente en el país.
Sí es posible comprar una casa en EE.UU. con el estatus I-220A, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos financieros y legales. Aunque no se tiene un estatus migratorio permanente, algunos inmigrantes han logrado obtener préstamos hipotecarios mediante la presentación de un permiso de trabajo válido y cumpliendo con los procedimientos de financiación establecidos.
Sin embargo, las nuevas restricciones hipotecarias limitarán el acceso de inmigrantes a préstamos hipotecarios asegurados por la Administración Federal de Vivienda (FHA), afectando a aquellos sin residencia permanente. A partir del 25 de mayo de 2025, los solicitantes deberán demostrar su estatus de residencia permanente para acceder a estos préstamos.
La compra de vivienda en EE.UU. con el estatus I-220A es un desafío que enfrentan muchos inmigrantes. Sin embargo, la historia de la cubana beneficiaria del parole humanitario I-220A es un testimonio de la resiliencia y determinación de la comunidad cubana migrante en Estados Unidos.