
El sistema de defensa antiaérea cubano ha recibido una importante actualización gracias a la cooperación técnica con Bielorrusia. Según el Comité Estatal Militar-Industrial de Belarús, los especialistas de la empresa ALEVKURP han modernizado el sistema de misiles S-125-2BM Pechora-2BM, una versión mejorada del clásico sistema soviético.
El sistema actualizado ha superado con éxito las pruebas de fábrica, incluyendo el lanzamiento exitoso de cuatro misiles que alcanzaron todos sus objetivos aéreos de entrenamiento. Además, se ha adaptado para atacar blancos terrestres, marítimos y objetivos con coordenadas fijas, convirtiéndolo en una plataforma más versátil frente a las amenazas.
En Cuba se estima que disponen de 144 lanzadores del sistema S-125, los cuales han estado en uso por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) desde hace décadas. Aunque considerados obsoletos por los estándares contemporáneos, estos sistemas han sido objeto de modernización para prolongar su vida útil y mejorar su desempeño.
Entre las mejoras realizadas al Pechora-2BM se incluyen la actualización electrónica integral, mejoras en el radar semiactivo de guiado, nuevas capacidades de rastreo de objetivos y extensión de la vida operativa de los misiles.
Además de Bielorrusia, Vietnam también ha desarrollado capacidades propias para mantener y mejorar estos sistemas. La Fuerza Aérea vietnamita ha reparado con éxito misiles soviéticos como los S-75, S-125 y S-300, y ha iniciado una actualización a la versión S-125VT, con componentes electrónicos diseñados localmente por la empresa Viettel.
En total, se estima que Vietnam mantiene 51 lanzadores S-125 Pechora en servicio activo, convirtiéndolos en su sistema de defensa aérea más utilizados. El S-125 Neva/Pechora es un sistema de misiles superficie-aire de origen soviético, diseñado en la década de 1950 para complementar a los sistemas S-25 y S-75.
En América Latina, además de Cuba, países como Perú y Venezuela han operado el sistema S-125. Perú adquirió seis plataformas S-125M Pechora y 126 misiles 5V27 Pechora, distribuidos entre el Ejército y la Fuerza Aérea. Venezuela, por su parte, cuenta con 24 sistemas modernizados S-125 Pechora-2M, que han sido integrados en su defensa antiaérea junto a otros sistemas como el S-300BM y el Buk-M2E.
La actualización de los misiles forma parte de un contexto más amplio de cooperación militar creciente entre Cuba y Bielorrusia, que se ha intensificado en los últimos años en el marco de un alineamiento estratégico con Rusia.