Abril de 2025 podría convertirse en el mes más seco registrado en Ciego de Ávila desde 2008, con precipitaciones por debajo del 30 % del promedio histórico. Los datos preliminares del Centro Meteorológico Provincial reflejan una tendencia sostenida de baja pluviometría en la región durante el último lustro.
La escasez de lluvias afecta no solo la disponibilidad de agua, sino también a la agricultura y otros sectores que dependen de los recursos hídricos. El meteorólogo Frank Fernández Castañeda destacó que la causa principal ha sido la influencia persistente de sistemas de altas presiones, o anticiclones, que generan cielos despejados y condiciones secas.
A diferencia de los ciclones tropicales que acaparan la atención mediática, estos fenómenos actúan de manera discreta, pero pueden provocar eventos de sequía prolongados. Tradicionalmente, mayo marca el inicio del período lluvioso en Cuba, aunque se espera una recuperación parcial del déficit de precipitaciones.
No obstante, este 3 de mayo se registraron lluvias y descargas eléctricas en varias localidades de la provincia. El Centro Meteorológico Provincial de Ciego de Ávila reportó la ocurrencia de precipitaciones intensas en Morón y la capital provincial.
Desde 2021, de los 24 meses comprendidos dentro del periodo lluvioso (mayo a octubre), en 14 se registraron anomalías negativas de precipitaciones. La provincia acumuló solo 163,5 milímetros de precipitaciones desde noviembre de 2024 a marzo de 2025, con un déficit de 41,1 milímetros.
Ante la reducción del caudal en las principales fuentes de abastecimiento y la caída en el rendimiento de los equipos de bombeo, las autoridades de Ciego de Ávila impusieron un ciclo de distribución de agua de 24 horas cada nueve días en todos los consejos populares del municipio cabecera.
Se prevé que las precipitaciones llegarán debido a una vaguada en niveles medios y altos de la atmósfera, aumento de la humedad relativa en buena parte del territorio nacional y calentamiento diurno. Los efectos de la sequía en Ciego de Ávila incluyen impactos negativos en entidades económicas, sociales y agrícolas.
La escasez de lluvias en abril se debe a la influencia persistente de sistemas de altas presiones que generan cielos despejados y condiciones secas. Se espera una recuperación parcial del déficit de precipitaciones en mayo, aunque la sequía seguirá afectando la provincia.
Las autoridades de Ciego de Ávila han implementado medidas para mitigar los efectos de la sequía, incluyendo un ciclo de distribución de agua de 24 horas cada nueve días. Se prevé que las precipitaciones mejorarán en los próximos días debido a una vaguada y aumento de la humedad relativa.
La sequía ha afectado no solo a la disponibilidad de agua, sino también a la agricultura y otros sectores que dependen de los recursos hídricos. La provincia necesita lluvias significativas para recargar los acuíferos y mitigar el déficit de precipitaciones.
Se prevé un aumento progresivo de la actividad lluviosa en los próximos días, aunque no se espera una recuperación inmediata del déficit de precipitaciones. La