
Las autoridades del Gobierno Provincial de Santiago de Cuba desmintieron informaciones sobre venta de gas licuado en Moneda Libremente Convertible (MLC) y eliminación del pan normado para adultos. El gobernador Manuel Falcón Hernández aseguró que ambas versiones son rumores falsos sin fundamento oficial.
Se abordó la escasez de productos básicos como el gas licuado, ausente en muchos hogares desde hace meses, y la harina destinada a la elaboración del pan. También se habló sobre la falta de granos, artículos de aseo y otros insumos esenciales.
El intercambio sirvió para establecer un compromiso de información continua y transparente desde las instituciones gubernamentales hacia la ciudadanía. Sin embargo, persisten preguntas clave sin respuesta, como cuándo llegará el gas de petróleo a los hogares cubanos y en qué momento se estabilizará la producción del pan normado.
El gobernador exhortó a la población a informarse únicamente a través de canales institucionales oficiales para evitar la propagación de noticias falsas que generan incertidumbre. Sin embargo, varios usuarios en redes sociales reaccionaron con escepticismo y ironía.
La internauta Yaimara Rodón resumió el sentir de muchos con ironía: “La información es que informaron sobre las informaciones, que se darán para informar lo ya informado. Síganlos para más informaciones”.
Los testimonios de ciudadanos que viven la escasez en carne propia se acumulan en las redes sociales. La activista Yamilka Lafita compartió su experiencia personal desde el reparto Guiteras, en La Habana.
“En mi reparto no entra el gas licuado desde hace varios meses. Por lo que cocinar se ha vuelto un acto de malabarismo. Ayer hablaba con una vecina que está fuera de Cuba y me pedía ayuda para adquirir el preciado combustible para sus padres, adultos mayores de 75 y 82 años que están desesperados con la situación de escasez”, denunció.
La búsqueda en redes refleja el colapso del abastecimiento oficial y la escalada en el mercado negro. Una balita de gas se ofrece por precios exorbitantes, lo que genera incertidumbre y frustración entre la población.