
Miguel Díaz-Canel, gobernante cubano, visitó la fábrica de automóviles Moskvich en Moscú junto al alcalde Serguéi Sobyanin. Durante el recorrido, elogió durabilidad y calidad de los vehículos, que aún circulan por Cuba décadas después de su fabricación.
La visita se realizó dentro del viaje oficial a Rusia, invitado por Vladímir Putin, coincidiendo con la conmemoración del 80 aniversario de la victoria soviética sobre Alemania en la Segunda Guerra Mundial.
Como parte del encuentro, Sobyanin anunció donación de diez automóviles Moskvich 6 a Cuba para servicios sociales en La Habana. Díaz-Canel destacó gran calidad y fortaleza de los Moskvich, vehículos que han sido parte del parque automotor cubano desde la época soviética.
La fábrica visitada es la más antigua de la marca Moskvich y ha sido completamente recuperada y modernizada. Durante el recorrido, Díaz-Canel pudo comprobar la calidad de los taxis que formarán parte de la flota en Cuba, resultado de acuerdos bilaterales firmados.
Según estos acuerdos, está previsto enviar 50 vehículos Moskvich a Cuba, incluyendo 25 del modelo Moskvich 3 y 25 del modelo Moskvich 3e eléctricos. La visita se enmarca en una serie de acuerdos bilaterales entre Cuba y Rusia para modernizar el transporte en la isla.
En noviembre de 2024, firmaron un memorando para la entrega de 50 vehículos Moskvich destinados a fortalecer el servicio de taxis en La Habana y Varadero. Además, en abril de 2025, Rusia y Cuba firmaron acuerdos para ampliar la colaboración en materia de transporte.
Estos acuerdos incluyen no solo la entrega de más vehículos Moskvich sino también apoyo técnico para su mantenimiento y la posibilidad de establecer un sistema de servicio postventa y suministro de piezas de repuesto. El pasado miércoles, Díaz-Canel fue recibido en el Kremlin por Putin, reafirmando los lazos históricos y estratégicos entre La Habana y Moscú.
Según la prensa oficial rusa, ambos líderes discutieron temas relacionados con la cooperación económica, energética, tecnológica y militar. Putin expresó su apoyo a Cuba frente a las sanciones internacionales y destacó que Rusia seguirá colaborando con la isla en diversas áreas.
Por su parte, Díaz-Canel agradeció a Putin el apoyo constante y subrayó que Rusia es un socio estratégico para el desarrollo de Cuba. Los acuerdos para la renovación de la flota de taxis en Cuba representan una solución moderada a la crisis del transporte en la isla.
Sin embargo, también evidencian una creciente dependencia de La Habana hacia Moscú. En lugar de diversificar sus relaciones económicas y comerciales, el gobierno cubano ha profundizado su alianza con Rusia, lo que para algunos críticos refuerza la dependencia tecnológica y económica de Cuba.